Tu ausencia me martiriza y sufro tanto por eso
Pero alimenta mi vida, la esperanza de un regreso

No, no demores, te grita mi alma que tu presencia me da la calma
No, no demores, mi corazón ven hacia el fuego de mi pasión

Mi corazón no resiste tanto martirio y quebranto
¿Qué vamos a hacer mi vida? ¿Si es que yo te quiero tanto?

Composição: Héctor Montenegro